LA ESTETICA DE LA CREATIVIDAD
LA DANZA
La danza o el baile, es la ejecución de movimientos que se realizan con el
cuerpo, principalmente con los brazos y las piernas, que van acorde a la música
que se desea bailar. Dicha danza tiene una duración específica que va desde
segundos, minutos, e incluso hasta horas y puede ser de carácter artístico, de entretenimiento
o religioso. Cabe destacar, que la danza es también una forma de expresar
nuestros sentimientos y emociones a través de gestos finos, armoniosos y
coordinados, y con ello, transmitir un mensaje a la audiencia. Entonces, la
danza, en muchos casos, también es una forma de comunicación, ya que se usa el
lenguaje no verbal. Es una de las pocas artes donde nosotros mismos somos el
material y punto de atención. Es un arte bello, expresivo y emocionante en
muchos aspectos, tanto para los que disfrutan con su contemplación (público),
como para los que bailan en ése momento (bailarín). La Danza, en la mayoría de
los casos, casi siempre es amena, pues puede disfrutarse por toda tipo de
personas. Aunque en algunas ocasiones, el apreciar un tipo de baile en
específico, dependerá tanto del tipo de audiencia, como del bailarín.
El hombre se ha manifestado a
través de las artes desde su aparición en la Tierra. Así nos llegan desde
tiempos remotos sus creaciones, y de su mano, sus costumbres, su vida, y su
historia. La danza no es ajena a este fenómeno, pues ha formado parte de la
historia de la Humanidad desde tiempos inmemoriales y es
de las artes que a través del tiempo ha sido un exponente importante para la
humanidad, utilizándose para diversos fines, como artísticos, de
entretenimiento, culturales, religiosos, etc.
"Siempre he pensado que la danza es mágica en
muchos aspectos tanto para los que disfrutan
de su contemplación como
para los que viven y trabajan en su mundo".
( Fontein de Arias)
muchos aspectos tanto para los que disfrutan
de su contemplación como
para los que viven y trabajan en su mundo".
( Fontein de Arias)
A lo largo de la historia,
la danza ha estado inmersa en todas las culturas del mundo, siendo una de las
bella artes más estudiadas por hombres y mujeres, quienes se han interesado por
ese hechizo que embruja a todos sus participantes y espectadores; por tal
motivo, la tradición de la danza es una fuerza extraordinariamente eficaz para
estudiar el devenir de las culturas.
Han (citada por Gardner,
1991,83), la define como "secuencias de movimientos corporales, no
verbales con patrones determinados por las culturas, que tienen un propósito y
que son intencionalmente rítmicos con un valor estético a los ojos de quienes
la presencian".
Le Boulch (1997,29) afirma
a propósito que: "el término de danza sólo puede aplicarse cuando las
descargas energéticas son rítmicas; es decir, obedecen a una ley de
organización temporal de movimientos; de evolución normal de una motricidad
espontánea que se convertirá en intencionada y controlada".
En efecto, la danza es una
expresión natural y espontánea en el ser humano, así como lo es el movimiento
que la impulsa a ser una manifestación común del sujeto, el que a su vez la
utiliza, o es utilizado por ella, como una forma de comunicación y expresión;
inclusive de aquellos sentimientos que son difíciles de comunicar con la
palabra. "El hacer enunciados no quiere decir que lo que uno dice es lo
que quiere decir, pues en la medida que uno diga lo que quiere decir, queda
reducido al enunciado, esto ya representa un sentido desenfocado. Caso distinto
con la poesía y el arte en sí, como obra y creación lograda que no es ideal,
sino espíritu reanimado que se acerca hacía la vida infinita". Gadamer
(1993, 583). Desde esta perspectiva, la danza como arte, va más allá (de la
finitud) de lo que simplemente se quiere decir, pues toca el espíritu del mismo
hombre.
En este sentido, la Danza
se puede presentar como un elemento que dinamiza la vida del hombre y la mujer
de múltiples formas; entre ellas:
·
Validar y reflejar la organización social.
·
Sirve como vehículo para la expresión secular o
religiosa.
·
Como diversión social o actividad de Recreación.
·
Como declaración de valores estéticos y éticos.
·
Para lograr propósitos educacionales.
Elementos fundamentales de la
danza
La danza se compone de diversos elementos
fundamentales, los cuales se interrelacionan, logrando transmitir emociones al
público y también para el mismo bailarín.
·
Ritmo
·
Espacio
·
Color
·
Estilo
tallerdedanzasunsmfisi.blogspot.com
COREOGRAFIA
Los elementos (movimientos) y
características específicas de una danza, se utilizan para elaborar una coreografía, pero también pueden inventarse nuevos movimientos
para crear una nueva coreografía y de igual forma pueden ser combinadas 2 o más
coreografías. También se utiliza la coreográfica en ciertas situaciones, cómo,
eventos o presentaciones artísticas las famosas coreografías en la cinematografía o el teatro.
Estos elementos
característicos de la danza, la sitúan como una de las artes más ricas en
cuanto a expresión y dinamización cultural, pues mediante su conocimiento se
puede inferir la dinámica de las diferentes culturas y regiones, y mediante su
práctica es posible redimensionar la expresividad cultural de todo un pueblo.
Por tanto, "la danza es la manifestación de una expresión espontanea
individual desde sus orígenes, y antes de ser una forma de arte, fue una
expresión espontanea de la vida colectiva." Le Boulch (1997,129.)
La danza es impulsora de
cambio, pues cada movimiento dancístico es expresión de un sujeto, de su
individualidad y su coordinación con la generalidad de otras individualidades.
Por eso, Kisselgoff (1988) considera que: "El mundo de la danza está
cambiando permanentemente ante nuestros ojos. Cada interpretación es un
crepúsculo..." pero la danza, que en sí misma es creatividad,
expresividad, fluidez y armonía; es a la vez exigencia y disciplina, pues la
realización máxima de su expresividad está determinada por la precisión de
movimientos elegantes, que no es en caso alguno el adiestramiento mecánico del
movimiento, sino una forma que hace posible la creación subjetiva de los
individuos.
Le Boulch (1998,130) habla
de la forma como la danza pertenece a la expresión, es decir: "manifiesta
un estado vivido". Es una comunicación viva y natural del bailarín que no
está condicionado por movimientos rígidos e impuestos por un agente externo; de
tal modo que el observador pueda percibir esa descarga de energía en afectos,
emociones y sentimientos. O sea, una serie de actitudes en mímicas, miradas y
gestos expresivos. De otra forma, si la mecanización domina en la formación y
el cuerpo del artista es condicionado con rigor por el profesor para producir
un fragmento completo, la expresión se empobrece y se manifiesta en un estilo
académico, preciso, alejado del valor emocional y viviente de la obra.
"Por fortuna, la dimensión actual de la danza ha recuperado su lugar
expresivo" Le Boulch (1998,131)
Por tanto, la danza es un
espacio que permea en sí misma, la posibilidad del sentimiento, en tanto
encuentro con la emoción y la pasión, en tanto reconquista de lo espiritual y
lo corpóreo o trascendencia espiritual del cuerpo, y en tanto escenario de
sufrimientos y alegrías, de angustias y calmas de voces y silencio.
La danza es una forma de
comunicación y expresión por excelencia; como dice Barysknikov (citado por
Gardner, 1991, 87), "un mundo de nuevos lenguajes, los cuales expanden su
flexibilidad y alcance en todas las culturas". Lo anterior, por que en
cada uno de los juegos dancísticos hay muchísimos lenguajes posibles; jamás
suficientes, claro esta, para expresar el universo infinito del deseo y la
pasión humana.
Por último, la danza se
encuentra muy relacionada con la Acción Física Humana; siendo esta última una
de sus manifestaciones culturales; las dos utilizan el movimiento humano como
campo de acción en el desenvolvimiento corporal y mental del individuo. De
igual forma tienen en cuenta el espacio temporal, la ubicación en un escenario
determinado, la calidad del movimiento y la forma de su estructura. Muchos
movimientos son posibles; desde los percusivos hasta los sostenidos, tienen
similar escenario de aparición y ejecución; así como muchas esferas del
desarrollo humano son influidas desde la misma dinámica de acción. La danza y
la Acción Física Humana son en consecuencia, un lugar de similares vocabularios
e idiomas.
"La música y el baile son dos artes que
se complementan y forman la belleza y
la fuerza que son la
base de la felicidad humana".
Sócrates
se complementan y forman la belleza y
la fuerza que son la
base de la felicidad humana".
Sócrates
EL BAILE
Concursos de Coreografias y Comparsas 2009. Febrero 13, 2009 por Tinerguia
tinerguia.com
El baile como tal, sugiere en
el individuo un deseo interno por comunicar algo de sí que lo caracterice;
puede ser a través de la expresión de su forma de vida, como sus pensamientos y
sus emociones; puede ser a través de la expresión de las costumbres y saberes
de sus antepasados, o por la necesidad lúdica del hombre.
Ahora bien, qué motiva al individuo a realizar
la acción de bailar? La necesidad de crear con su cuerpo una serie de imágenes
y percepciones en sí mismo y en los demás para dar a entender una idea; pues
como lo asume Fast (1990, 20) "hay expresiones que todo ser humano hace y
que de algún modo comunica una imagen y un significado a todos los otros seres
humanos cualquiera sea su raza, sexo, credo o cultura"; estas expresiones
se pueden dar a conocer, según el mismo autor, por medio del baile.
Puesto que la imagen creada a través del cuerpo,
puede ser expresada en el baile, esta implica una relación directa con la
percepción simbólica de los sujetos; en tal sentido, cuando el hombre y la
mujer crean un conjunto de símbolos e imágenes expresados por movimientos
rítmicos, están dando una connotación de baile como medio de comunicación entre
los seres humanos, pueblos y sociedades.
Desde esta perspectiva, se evidencia como el
individuo necesita expresar todo lo que siente no sólo a través de la palabra
sino con la expresión propia de su ser. Por ello, el baile se ubica dentro de
las artes, ya que su eje central es el de comunicar una idea o un sentimiento
por medio de expresiones, consideradas estas "como todo aquello que
concierne a lo que la persona vive con sus afectos y con sus emociones".
Le Boulch(1998,32).
Por tanto, toda acción de comunicación que va
dirigida a otra persona, puede ser cargada de expresión; pues de lo contrario,
seria una acción sin expresión, sin sentido, puesto que el lenguaje no puede
carecer totalmente de afectividad.
El baile entonces, es parte complementaria del
sujeto, ya que todo sujeto siente el deseo de manifestar algo de su
cotidianidad ante los demás, pues el hombre según Lifar (1978,23) "Ha
bailado y seguirá bailando por encima de la palabra", dado que este deseo
de querer exteriorizar y comunicar un acto simbólico que hace parte de su vida,
no lo puede reemplazar la expresión oral, sino que debe involucrar todo su
cuerpo.
Por ejemplo: "Cuando el hombre corteja a
una dama y la galantea hasta hacerla suya, los movimientos del hombre son
discretos, alegres y varoniles; la mujer se muestra tímida pero baila con
alegría y delicadeza, y ellos se transan en una lucha de conquista... haciendo
que el juego amoroso sea más atractivo e interesante, tanto para quienes lo
bailan como para quienes se divierten de él". Se está evidenciando un acto
simbólico que se hace realidad por medio de una secuencia de imágenes que se
manifiestan a través de gestos expresivos. (Londoño 1989, explicando el baile
del bambuco en Colombia).
Londoño en su libro de "Baila
Colombia"(1995,8), expresa que el baile es "una serie de mudanzas que
hacen los que bailan, es movimiento rítmico; la expresión corporal que se hace
al compás de la música... baile es danza". Con lo que está significando
que un baile o bailes hacen parte del gran mundo de la danza; a la vez que ella
hace parte de este. Con la danza como universo del baile se expresan
sentimientos y emociones culturales. En tal sentido, la danza es una de las
artes más humanas, pues en ella se unen el espíritu y el cuerpo al servicio de la
belleza corporal, de la salud, de la inteligencia y el conocimiento.
En este sentido, cuando se habla de danza, no se
esta haciendo referencia de igual forma al baile; pues en el primer caso, tiene
albergue el conjunto de emociones, sentimientos, ideas y pasiones expresados; y
en el segundo caso, se refiere al medio a través del cual se ponen en escena
tales aspectos. Baile, es aquella parte que hace de la danza una realidad, en
la cual una persona entra en su mundo. La danza al querer expresar un acto
simbólico como el amor, la pasión, las costumbres o el modo de ser de un
individuo o de una comunidad, lo hace por intermedio del baile o bailes.
Serrano (1996,29) por ejemplo, al hacer un
estudio entre el consumo del Rock de los jóvenes urbanos, toma un relato de un
joven quien considera esta diferencia al decir. "En el concierto siento
algo que está faltando, es la manada, porque ahí es donde uno pierde ese ser
social... con los demás uno pogea, ese antibaile que es negativo que lo llaman
baile (Pogo) porque justamente constituye para mi negar eso, el baile de
compromiso..."; en esta expresión, el joven considera que la danza es
mucho más que el baile, pues ésta implica comprometer a la manada en el
sentimiento que ocasiona la acción de bailar.
También se puede bailar por simple diversión; es
decir, como juego donde hay una liberación de energía en forma gratuita sin
ningún propósito determinado y con el ánimo de traer alegría al cuerpo. En este
sentido Le Boulch afirma "que el juego es común al hombre y a los
animales, y sus manifestaciones más primitivas son descargas motrices que toman
el aspecto de gritos, de carreras y de gesticulaciones diversas..."
esencialmente el juego aparece como una forma de expresión.
BAILE POPULAR
Son aquellos bailes que se pueden apreciar por la mayoría del público, y
que pertenecen a la cultura popular.
Generalmente llevan movimientos y elementos armoniosos, suaves y coordinados.
Estos bailes también se practican desde tiempos anteriores.
Por todo lo anterior, se puede observar una diferencia entre danza
y baile. Pese a que los dos se complementan y están íntimamente relacionadas.
Sin embargo, aunque la danza se hace visible por medio de bailes, no siempre se
baila para comunicar algo en sí, sino que se puede bailar por alegría,
diversión y desfogue de energía, siendo una práctica como dice Gardner (1991,
28) en forma de juego (libre y espontáneamente); por el contrario, la danza
comunica un estado vivido, la cual va mas allá del simple juego(sin querer
decir con esto, que el que danza no juega; pues también se puede jugar con gran
significación y no sólo por divertirse) siendo a su vez, más extensa y
holística que el baile.
La danza permite que muchos sujetos le
encuentren sentido y razón a su modo de ser y de actuar, ocupando un lugar
importante dentro de la vida de aquel que la practica. No obstante, dice Le
Boulch, "danza y juego difieren por la significación que encierran
respecto a la conducta del individuo que juega (baila); el juego es una
actividad relacionada con las cosas ubicando su resultado en el nivel de la
operatividad¨. Pero otros hacen de la danza su razón de ser y de vivir, su ser
proyecto al arrojarse a su mundo, el cual en muchas ocasiones es incomprendido
por su alto grado de expresión y significatividad.
La danza, entonces, pertenece a la expresión de
la corporeidad, es decir, manifiesta un cuerpo vivido y sentido; el baile, se
convierte en ese medio, para vivir y sentir esa corporeidad. Se podría afirmar
entonces, que una persona puede hacer de la danza un estilo de vida como Lifar
(1968,168), quien dijo de ella: "la danza es el arte al que sirvo en todos
los instantes de mi vida y al que considero el primer elemento de mi ser. Toda
mi concepción y percepción de la vida son en función de mi mentalidad
dancística".
BIBLIOGRAFIA
- FAST, Julius. El lenguaje del cuerpo. 10a. ed. Barcelona: Kairos, 1990. Cohen, S, J. - Dance As a Theatre Art: Source Readings in Dance History from 1581 to the Present. Princeton Book Co. 1992. ISBN 0-87127-173-7
- Marcelle Michel, Isabelle Ginot - La danse au XXe siècle. París, Larousse, 1995 (ISBN 2-04-019984-5).
- Amelie Soyka - Tanzen und tanzen und nichts als tanzen. Tänzerinnen
- - der Moderne von Josephine Baker bis Mary Wigman. AvivA, Berlín, 2004. ISBN 3-932338-22-7